Para empezar me gustaría ponernos un poco en situación y contaros como llega a Aprendiendo con Montessori esta idea de: "Expositor de Rutinas".

Veréis hará como unos cuantos años, mi familia y yo decidimos viajar hasta Madrid, por aquel entonces el nombre de "Disciplina Positiva" apenas se conocía. Habían poquitas cosas circulando por la red y también a nivel de tú a tú. Así que por mi cuenta y como pude estuve investigando antes de apuntarme al curso de certificación que impartían Gina Graham y Marisa Moya, y me pareció una magnífica oportunidad para seguir creciendo como mamá. No sabía que me iba a encontrar, pero el destino quiso que la Disciplina Positiva se topara en nuestro camino como familia. Así que nos embarcamos en esta aventura.

Nos pusimos en contacto con Marisa Moya, que en todo momento fue muy atenta, pues claro por aquel entonces mi peque apenas tenía el año cumplido. Recuerdo llegar al primer día de la formación espectante, Marisa nos recibió con su sonrisa y su abrazo, y comprendió enseguida la importancia de nuestro vínculo, el de mi peque y el mio, para que compaginara la formación con la lactancia materna. La formación fue intensa, con muchísimas cosas para digerir, me caló hondo.

Tras la formación seguí en contacto con Marisa, mi mentora, de hecho nunca hemos perdido el contacto. Y todo lo que aprendí lo compartí con mi pareja. Y una de las herramientas que empezamos a utilizar en casa con un diseño muy casero fue el expositor de rutinas. Esta idea surgió tras la formación. Así que bueno tras crear el expositor para casa y ver lo bien que nos había funcionado una amiga me dijo "¿por qué no lo expones para que más familias puedan tener uno así? Yo por ejemplo no tengo tiempo para hacer uno y me vendría genial".

La idea en un principio era con fotos, pero dio la casualidad de que nuestro pequeño sentía un gran interés cuando las imágenes eran dibujos, tal vez porque pensaba que era como uno de sus cuentos. Así que pensamos que lo mejor eran dibujos y que en un solo color aislaban toda distracción y a nivel visual más concretos. Y así fue como esta idea se fue removimiendo en mi cabeza y en la de mi pareja. Y de repente hablando con Marta Abad Blay, ilustradora y amiga, pues surgió. Nos pusimos a ello, mano a mano.

He de decir que quizás también movida por mi profesión, Educadora de personas con diversidad funcional, donde he trabajado con pictogramas con éxito, y también por mi formación como Guía Montessori donde el orden adquiere una parte fundamente. Se fueron uniendo todas estas ideas que llevaba en mi cabeza y que finalmente materializamos.

Así creamos el expositor de rutinas que consta de 14 tarjetas ilustradas de rutinas en papel yupo (100% reciclable) y un expositor en tela con una flechita con la intención de que las rutinas del hogar, de cualquier hogar, no se tomen como órdenes "lávate los dientes, vístete" sino más bien como un proceso de aprendizaje, donde el respeto esté presente.

 

De alguna forma lo que se pretende es evitar las exigencias que por nuestro día a día existen, prisas, nervios, etc. Y mostrar otra forma de hacerlo para que las rutinas no desencadenen en lloros y peleas.

Digamos que el expositor de rutinas es un anticipador de lo que va a pasar. Los adultos tenemos nuestro día a día en nuestra cabeza, pero nuestros pequeños ni siquiera saben qué pensamos y les vamos llevando de un lado a otro pretendiendo que entiendan "que ahora toca esto".

Nuestro pequeños con su cerebro tan inmaduro necesitan poder visualizar qué va a ocurrir, ya no digo de palabra, más bien hablo de que lo vean "¿qué pone en el expositor de rutinas?". Imágenes que muestren secuencialmente al niño qué va a pasar en su día. Como si de un cuento se tratase visualizar"me levanto, me lavo la cara, desayuno, me lavo los dientes, me visto, me despido de mamá/papá y voy al cole". Todo eso pasa en una mañana y esperamos que muchas veces lo comprendan sin antes haberlo visto.

Las rutinas cuesta más entenderlas cuando volvemos de vacaciones. De repente un día nuestros pequeños pasan de estar todo el día con nosotros a ir al colegio ¡sorpresa! ¡nadie les avisó! ¡Nadie les hizo VER que iba a pasar!

El expositor de rutinas ha de utilizarse como una herramienta más de nuestro día a día, como algo positivo, no como algo punitivo. No esto no lo queremos. Tampoco como algo mágico, pues  todavía no existe una pildora milagrosa que cambie las cosas de "ya para ya". Más bien es una invitación al niño, una invitación a que de manera autónoma vaya al expositor y él mismo visualice que ocurre "Veo que tienes muchas ganas de jugar ¿viste qué toca en el expositor de rutinas? o tal vez podamos decirle "mmm...¿qué pone en el expositor de rutinas? ¿me puedes ayudar?"

1. INVOLUCRAS AL NIÑO creas CONEXIÓN

2. EVITAS LA AUTORIDAD "vistete" por un "qué sigue en el expositor de rutinas?" invitas a CONECTAR

3. FOMENTAS LA MEMORIA, CONCENTRACIÓN, AUTONOMÍA Y SENTIMIENTO DE CAPACIDAD. Creas MOTIVACIÓN SIN CONTROL

Sinceramente pensamos que es un buen recurso para el hogar y también para las aulas para conectar con nuestros pequeños, para mostrarnos a los adultos que otra forma de comunicarse es posible, una forma que busca la conexión y la pertenencia.

De momento las unidades que tenemos son limitadas y se puede adquirir a través de nuestro email: hola@aprendiendoconmontessori.com 

¡Muchas gracias por compartir este ratito con nosotros! ¡Todo un placer!

Os esperamos con mucho gusto en nuestro blog y escuela para familias: www.aprendiendoconmontessori.com donde encontraréis muchos recursos para el día a día.

Cristina de nuevo gracias por tu entrega, tu trabajo y por contar siempre con nosotros, ¡un abrazo!